Kimberly L. Becker es autora de las colecciones de poesía Words Facing East; The Dividings (WordTech) y Flight (próxima a publicarse en MadHat Press). Sus poemas han aparecido ampliamente en revistas y antologías como IDK Magazine, Panoply y Tending the Fire: Native Voices and Portraits. Ha tenido subvenciones de MD, NC y NJ y residencias en Hambidge, Weymouth y Wildacres. También ha leído en lugares como el Museo Nacional del Indio Americano en Washington, DC, y en el festival Wordfest. Ha sido mentora para los programas de escritura en las prisiones del PEN America, y “De escritor a escritor” de la AWP. www.kimberlylbecker.com
Para la presentación de estos poemas, Kimberley nos envió esta poderosa declaración sobre su arte, a su vez una invitación para las nuevas generaciones:
“Como poeta de raza mixta que se identifica como Cheroqui, no presumo hablar por ninguna nación soberana ni tampoco identificarme con la cultura dominante. Soy indocumentada [sin la cédula indígena] y describo esta experiencia en un ensayo pronto a publicarse en la antología Unpapered, coeditada por Diane Glancy y Linda Rodríguez.
Mi trabajo está influenciado por mis propios intentos de honrar mi herencia a través del estudio del idioma, la cultura y la historia. Sigo a mis mayores y a mis maestros literarios, como la brillante Allison Hedge Coke, que me enseñó a “mantener la puerta abierta” para los demás y, por ello, trato de devolver lo que puedo.
Si, como escribió Tillie Olsen, “toda mujer que escribe es una sobreviviente” y si, como escribió Audre Lorde, “hablamos conscientes de que se suponía que no debíamos sobrevivir”, entonces cada escritora de ascendencia nativa, documentada o indocumentada, no es solo una sobreviviente, sino también una testigo contra el racismo institucionalizado que aún prevalece en este país. El holocausto sucedió aquí también; el rostro de Andrew Jackson está en nuestra moneda y su retrato se cuelga en la Oficina Oval de nuestro actual presidente corrupto.
Afortunadamente tenemos a Joy Harjo como Poeta Laureada, la primera poeta Nativo-Americana en ese rol, una importante reivindicación cultural. Lean el trabajo de ella y de tantos escritores indígenas que son de la tierra y hablan la sabiduría de los antepasados que estuvieron aquí primero. Levántense jóvenes escritores. Mantengan la puerta abierta. Hagan de su escritura una ofrenda. Oren. Celebren lo que puedan. Denuncien la injusticia cuando la vean. Invoquen la fuerza de las generaciones que nunca fueron destinadas a sobrevivir, pero que lo han hecho. “
Clases de idioma © Traducción de Paul M. Worley y Xun Betan
Canción matutina, En su morado azul, Cachorro de angustia, El Cheroqui en mí, Ve al agua en tu imaginación, y Cobre © Traducciones de Paul M. Worley
CLASES DE IDIOMA
escrito en Qualla Boundary; para C.M.
CANCION MATUTINA
EN SU MORADO AZUL
LA CHEROQUI EN MÍ
VE AL AGUA EN TU IMAGINACIÓN
COBRE
SOBRE EL TRADUCTOR
Paul M. Worley es profesor asociado de Literatura Mundial en Western Carolina University. Es autor de Telling and Being Told: Storytelling and Cultural Control in Contemporary Yucatec Maya Literatures (2013; las historias orales grabadas en este proyecto están disponibles en tsikbalichmaya.org y con Rita M. Palacios es coautor del libro Unwriting Maya Literature: Ts’íib as Recorded Knowledge (2019). Es becario Fulbright y ganador del premio Sturgis Leavitt del Southeastern Council on Latin American Studies. Además de su obra académica, Worley ha traducido obras selectas de autores indígenas como Hubert Malina, Adriana López y Ruperta Bautista, como editor para México de la revista de literatura global en traduccion al ingles, Asymptote, y como editor de poesía para North Dakota Quarterly.